Un gran reencuentro de amigas varias décadas después

Se ha convertido en habitual el ver como en las redes sociales se crean eventos para organizar reencuentro de amigos o ex compañeros de escuela o del instituto que se perdieron el rastro hace 20, 30, 40 o más años.

En Castuera un hecho similar, pero a la vez bastante particular, reunió el pasado mes de agosto a un grupo de amigas criadas en la calle Nueva de la localidad, algunas de las cuales no se veían desde hacia bastantes años.

El Centro de Mayores fue el lugar elegido para este reencuentro organizadopor Auri Guerrero, que fue la encargada de ir tirando del hilo para contactar entre unas y otras, y que lo que parecía imposible se llegase a conseguir.

Sevilla, Mondragón Madrid, Puertollano, Navarra, Elche o Barcelona son algunos de los lugares donde la diáspora de la emigración llevó a estas amigas y desde donde hicieron el viaje de vuelta, en esta ocasión acompañadas por sus respectivas parejas.

Además de Auri Guerrero, en este particular reencuentro se dieron cita Buensu Cáceres, Antonia González, Amalia Godoy, Manoli Haba, Kiki Tena, Manoli Martin, Tomi Fernández y Toni Tena, junto a sus maridos Eustaquio, Vicente, Paco, Mauricio, Manuel, Juan José, Lorenzo, José Antonio y Rufino. También hubo un recuerdo para quien no pudo asistir como es caso de la monja de clausura, María Galán.

Emoción por volverse a ver e inquietud por saludar y abrazar a la amiga de la infancia con quien compartieron pupitre en la escuela, cumpleaños, fiestas, juegos en la calle, y sobre todo una amistad que ha perdurado en el tiempo aunque hayan pasado varias décadas sin volverse a ver.

Los sentimientos se agolparon cuando tras el saludo de Manuel Morillo comenzaron a ver la proyección de fotografías de aquella época acompañadas por distintos textos y reflexiones que se habían preparado para la ocasión.

Después de la comida y una relajada sobremesa, pasearon por las calles de la localidad donde conversaron de sus vidas y también acerca de los cambios que el paso del tiempo ha traído a Castuera.

A la jornada de convivencia se sumaron también la concejala del Ayuntamiento Piedad Roso, y la empresaria Ángela Núñez, también nacidas y ciadas en la misma calle que las organizadoras de la reunión, y las que les une una relación de amistad y en algún caso también familiar.